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Religiosidades

De repente los ecos divinos
que en el tiempo se apagaron,
desde lejos de nuevo llamáronle
con el poderoso encanto
que del fondo del sepulcro
hizo levantar a Lázaro.

Agitóse al oírlos su alma
y volvió de su sueño letárgico
a la vida, como vuelve
a su patria el desterrado
que ve al fin los lugares queridos,
mas no a los seres amados.

Alma que has despertado,
vuelve a quedar dormida;
no es que aparece el alba,
es que ya muere el día
y te envía en su rayo postrero
la postrimera caricia.

(Rosalía de Castro)

La muerte es un don. Pues gracias a ella vivimos cada momento como si fuera el último. El crepúsculo complementa al alba. También, ¿por qué no? gracias a Tánatos vive Eros.

Pero la muerte es una maldición. Temer el final. La oscuridad. Pues estamos condenados...

¿O no? La eterna pregunta del hombre.

Ojalá fuera espiritualidad. Pero no. Hablamos de antropología.

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